¿Cómo pueden las marcas satisfacer la demanda de los consumidores de una nutrición sostenible y saludable?

Los consumidores quieren alimentos y bebidas "más sanos". Según una encuesta realizada por la Food Standards Agency (FSA), 87% de los consumidores afirman que es importante comer sano, y 63% desean introducir cambios en su dieta para hacerla más saludable.
Al mismo tiempo, los consumidores buscan estilos de vida más sostenibles. La misma encuesta de la FSA mostró que 73% de los consumidores piensan que es importante comprar alimentos que tengan un menor impacto en el medio ambiente.
Detrás de ambas tendencias está el auge del veganismo flexible. Los productos lácteos de origen vegetal son una categoría que se ha disparado en los últimos años debido a las opciones dietéticas veganas flexibles.
Según Future Market Insights, es "probable que el mercado de la leche de origen vegetal crezca significativamente" a una tasa anual compuesta de 8,8% entre 2021 y 2031, a medida que los consumidores renuncien cada vez más a los lácteos tradicionales en favor de alternativas a base de soja, avena o almendras. ¿Cómo responden las grandes marcas a la demanda de productos no lácteos nutritivos y sostenibles? ¿A qué retos se enfrentan los fabricantes de leche vegetal para abordar la salud humana y planetaria? ¿Cómo piensan evolucionar ante las cambiantes demandas de los consumidores?
Leche de avena Si los consumidores renuncian a los productos lácteos tradicionales por motivos de salud, medioambientales y éticos, decidir qué alternativa vegetal utilizar no es tan fácil. La leche de soja se considera una alternativa láctea clásica y es el producto vegetal más popular del mercado. Sin embargo, en Norteamérica, la leche de almendras ha sido la leche vegetal más popular del mercado en los últimos años. No sólo eso, sino que entre las muchas leches vegetales, la leche de avena ocupa una posición destacada y se ha convertido en una categoría importante en Europa y Estados Unidos, liderando el mercado. En el Reino Unido, por ejemplo, según los datos de IRI Infoscan, las ventas minoristas de leche de avena en el Reino Unido alcanzaron $181 millones en 2020, un aumento interanual de 98%, estableciendo la leche de avena como la mayor bebida alternativa láctea.
El reto.
Garantizar que los productos lácteos de origen vegetal satisfacen las necesidades de salud de las personas y del planeta no es tarea fácil. Las alternativas vegetales suelen contener naturalmente niveles más bajos de proteínas y calcio que la leche convencional. En términos de sostenibilidad medioambiental, no todas las variedades de leche vegetal son iguales: las almendras requieren más agua que cualquier otra alternativa láctea, con más de 1.500 litros de agua necesarios para producir un litro de alternativa láctea. Los fabricantes de bebidas vegetales deben tener en cuenta la sostenibilidad de sus productos. Aunque puede ser mejor para el medio ambiente reducir la cantidad de productos lácteos y cárnicos que todo el mundo come y bebe, no todos estos productos se producen de la misma manera y con la misma huella de carbono, por lo que pueden tener un impacto potencialmente negativo en el medio ambiente. El mayor reto para la mayoría de los fabricantes de leche vegetal es garantizar que toda su cadena de suministro y producción reduzca al mínimo su huella de carbono.
Satisfacer las cambiantes demandas de los consumidores Otro reto es cómo reaccionar cuando cambian las demandas de los consumidores. Sabemos que muchos consumidores están reduciendo su consumo de carne y productos lácteos en favor de alternativas vegetales. Y lo que es más importante, los consumidores participan cada vez más en la lucha contra el desperdicio de alimentos. Unilever, por ejemplo, quiere reducir a la mitad el desperdicio de alimentos de sus operaciones directas para 2025, y actualmente trabaja con proveedores y clientes para reducir el desperdicio en toda la cadena alimentaria.
La demanda de envases sostenibles por parte de los consumidores también está aumentando. Hoy en día, la mayoría de los consumidores dan prioridad a los envases y productos sostenibles a la hora de comprar. Según Reportlinker, se espera que el mercado mundial de envases sostenibles para alimentos crezca de 196.260 millones de USD en 2021 a 211.560 millones de USD en 2022, a una TCAC de 7,8%, y se prevé que el mercado alcance los 280.100 millones de USD en 2026, creciendo a una TCAC de 7,3% durante el período. Los fabricantes se ven obligados a replantearse los materiales utilizados en los envases, impulsados por la doble fuerza de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Según la investigación de Presence, el uso de envases reciclables en toda la cadena de suministro de envases ha aumentado en 23% desde el año pasado, con un incremento de 9% en cartones asépticos y de 2% en vidrio. Se espera que en el futuro del mercado alimentario, el envasado de los productos influya en gran medida en las decisiones de compra de los consumidores, y que los productos creados en torno a envases "0 residuos" ganen popularidad.